Un hippy.

 Cuatro caminos hay en la vida...dice la canción.  La vida es un continuo elegir, sino continuo hay momentos que eliges, supongo que dentro de circunstancias coyunturales, capacidades, opciones, y la suerte interviene. Como todos me he encontrado en esos cruces de caminos en diferentes edades. Siempre sin tocar la guitarra. Confieso que nunca estuve seguro, simplemente había algo que me daba un empujoncito. Lo he visto también en personas de mi entorno sin tener la información que tengo sobre mi mismo. Desde luego hay un riesgo encantador. Homo homini lupus.

Uno de los dilemas era donde vivir otro qué hacer o cómo ganarte la vida y no entro en filosofías de qué somos a donde vamos que siempre han estado ahí. Homo homini lupus,  veo la hipocresía  de los medios, dependiendo del politiqueo, en juzgar una muerte en Gaza. Un dilema para unos y otros. Un negocio para muchos.

Conocí hippies auténticos, originales, desconozco como acabaron, probablemente se dieron todo tipo de casos. Y leo con tristeza que la isla de Ibiza es prácticamente un negocio. Homo homini lupus. Me alejé porque se veía que se la cargaban hace mucho tiempo, porque el ser humano se carga todo y las redes sociales se lo cargan más rápido. Hubo un tiempo que hablar de Ibiza significaba repasar la geografía del cole y recitar las Baleares...Mallorca, Menorca...ecco...qué dicen los italianos.

Todavía quedan lugares así , están lejos, no hay masa horrible como en Venezia, puede ser  en Australia o en la Polinesia qué placer qué vida, qué ausencia de gente ¿ Será el ser humano el que lo estropea ?