No digo que la dorada y soleada California sea sitio de meditacion, pero hay gente que te ayuda a meditar, probablemente como en cualquier lugar de este planeta.
A mi me han atraido siempre las formas y cultura de la India, ese inmenso y complicado pais es un buen lugar para mediatar, si te acostumbras.
Me invitaron a una clase de grupo y levante la mano para indicar que era mi primera vez.
Luego estuvimos 25 minutos concentrados hasta que me desperto el gong de la profesora; alguno de los asistentes confeso que alguna cabezada habian dado.
La verdad es que no es mala idea meditar, aunque entiendo que se trata mas de airear nuestra mente y conseguir que la vida cotiana no nos sature.
Desde luego nos preocupamos, mas o menos, del mantenimiento del coche propio y poco hacemos por mantener esa extraordinaria herramienta que es nuestra mente. A veces me pregunto que harian Aristoteles y esos grandes tipos para coger aire y enfrentarse a sus dudas e inquietudes.
Antes de la clase por la tarde estuve un buen rato tocando, acariciando, la mano de una hermosa little girl que tiene una enfermedad que impide que sus organos crezcan y su desarrollo es limitado. Me quede admirado viendo a su madre joven con otro bebe y embarazada, sonriendo siempre y atenta a todos los movimientos de esa prole. Estuve muchos minutos acariciando su mano, me la apretaba y me hice la ilusion de creer que le gustaba.
Medite, pedi porque se curase como unica salida, no me importaria cambiarme por ella.
Su madre dice que saben que va a vivir poco tiempo mas y que ha mejorado desde que tiene un segundo hermanito. Medite sobre las razones de estas cosas que marcan una vida, por mucho que medite no encuentro una explicacion; existen las razones medicas, cientificas, y luego hay que enfrentarse a ello.
Algun sentido debe tener todo esto.
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