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Sigo a vueltas con el FG que quiere decir Fiscal General, no piensen mal. Ahora comparten la misma tesis que la defensa en resolver uno de los 379 asesinatos de ETA pendientes, por aquello de las instrucciones. Estamos llenos de eufemismos, como lo de la financiación singular. La política ya lo es de por si, lo admitimos, aceptamos sus eufemismos, aunque hay que poner un límite. El pulpo no es un animal de compañía aunque nos quieten el juego. Puede que sea posible el siguiente hecho: el español medio, que ya no sé lo que es ni cuantos, es capaz de decir más nombres de Fiscales Generales del Estado que presidentes del Constitucional o del Consejo del Poder Judicial, no se de qué es indicativo. Lo cierto es que ese puesto nombrado a dedo y capricho del presidente del gobierno de turno es una herramienta para uso del ejecutivo con fines dudosos a veces. El legislativo se puede utilizar para aprobar leyes siempre que tengan el consenso suficiente aunque unos traten de destruir lo construido. Entonces el tercer poder el que equilibra es el judicial porque se supone que es independiente y así debe funcionar esto. He tenido que repasar en internet los nombres. Supongo que me suenan más porque los medios u oposición dieron la tabarra. El primero de la democracia, son 46 años transcurridos, que me acuerdo es Moscoso, Torres, don Eligio, Granados, Úrculo, Cardenal (7 años cara de fiscal) Conde-Pumpido (7 años), Navajas ( 3 veces poco tiempo), Madrigal , Maza, Melgar, Navajas (2 veces poco) Segarra, Lola Delgado, y el ínclito de ahora. La mayoría poco tiempo demasiado politiqueo, o no tenían hipoteca o no estaban dispuestos a tragar tanto  o una úlcera, vaya usted a saber.