Estaba repasando documentales de hace años, uno sobre Hitchcock, que hacía películas. Otro sobre Ian Fleming ex oficial de la Royal Navy, Inteligencia principalmente, en WW II, creador de Bond, James Bond. Ambos personajes de una manera u otra han sido capaces de contar historias en el cine variadas, aunque impera el llamado
suspense, para el director. En las novelas de 007 se trata la guerra más bien la fría, vista a través del ojo de un inglés, un personaje alter ego del autor, mujeriego, bebedor, solucionador de problemas con licencia para matar. En el fondo se trata de conseguir una buena historia. Yo siempre he pretendido escribir una buena historia, pero española de España, mi época. Me inspiró mi abuelo en su personalidad su vida para la suya, de mi padre he tomado muchos detalles pero no hablé con él lo suficiente para hacerle preguntas o cuando lo hice era tarde. Le pedí a un amigo, ya fallecido, allá por 1992, después del
Unforgiven de Eastwood que me contase cosas porque me parecía un personaje de mucho juego de novela negra, necesitaba detalles o anécdota o la expresión personal de sus ideas que nunca le oí expresar porque hablaba poco con cierto laconismo. Ahora tengo otro amigo llamemoslé X. Me gusta su personalidad y me gustaría que me contase su vida para adaptarla a esta España que más o menos he vivido, como fué Bond, James Bond, en su momento. A él le gusta mucho el cine lo entenderá un personaje educado, buenas maneras, caballero generoso, con gusto, discreto, travieso a su manera, quizá me lea y me dé el si, necesitaría tiempo.
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