La locura de la guerra.

Bonita frase, siempre simplificando con algún interés, en efecto la guerra es locura, que la Tercera Guerra Mundial es una realidad resulta cuestión distinta. De pronto la Defensa es fundamental... aparentemente, sobre todo en esta UE, Europa, que nunca ha sabido hacerlo. Es curioso leer supuestas formaciones de El País , ABC o LA Razón, dan muchas noticias sobre estos temas también muy flojas. Los de El País han  sido repetitivos en esta Semana Santa pasada, gaceta del gobierno, todas las alarmas con los llamados temas de Defensa: entrevista  a Donald Tusk, que no es Donald Trump; el tema Ucrania, y ofrecimiento a la NATO de Mahón,  como base de la Alianza, junto a maniobras militares de Marruecos frente al Sahara. Todas son noticias inexactas que captan la atemción. Todo a la vez, cuando el ejemplo de los medios hispanos desde mi poco uso de razón ha sido no saber responder más que con tópicos e inexactitudes a lo que significa la Defensa, que por no casualidad es un tema serio. El ejemplo profundo de los políticos con sentido de lo que significa defensa y el precio a pagar siempre me ha parecido cuanto menos  desenfocado, ignorante y patético por la inmensa mayoría, en público o privado. Como es Sabado Santo otra noticia era Arrimadas arrimada o  la procesión del Cristo en Málaga a volandas de los legionarios del Tercio don Juan de Austria nunca mejor dicho. Ya no es el de Mena es el de la Buena Muerte o el de los legionarios. Estaba este año doña Sofía. Ya he contado de un almirante italiano que lloraba con Nessun Dorma y doy fe. A mi me pasa con El Novio de la Muerte, no puedo evitarlo. Ya me pasaba de niño en los veraneos de Melilla y se que esos legionarios, en cuya vida nunca me he metido, están dispuestos a morir sin dudarlo aún contando con esos políticos que saben tanto de defensa, seguridad y son tan honestos. Y es que como decía mi abuelo, legionario, cada uno es lo que es y nada más.