Los reveses.

Soy un cobarde, no soy un hombre al que la suerte hirió con zarpa de fiera. Una vez oí a Juan Manuel Serrat anunciar  que tenía una enfermedad complicada, dijo algunas cosas, dijo algo así: "La vida no es lo que te sucede sino como te tomas lo que te pasa", cierto, fácil de decir, difícil de seguir, pero cierto, lo mejor fue la fuerza de espíritu con que lo dijo. Allá por los sesenta le vi con un Bugatti en aquella Ibiza de luna, sueños, estilo, sin gente. Aquí en Australia, con poca gente hay cosas que están lejos o cerca, cerca del corazón tan insustanciales como el fútbol, un campeonato  o para muchos un equipo de fútbol. Voy a escribir antes de  ver el último partido del Madrid, que es a las dos de la madrugada; lo llamado normal, lo más probable, es que el campeón sea el Atleti, porque tendrá más puntos; debe ganar su partido y eso es lo necesario, si nosotros ganásemos, lo de los merecimientos es otra cuestión, el fútbol no es cuestión de justicia. Se felicita al ganador y a otra cosa mariposa, no queda más. El campeonato es largo, las vicisitudes variadas, el resultado marcará con o sin justicia el devenir posterior,  los medios se dirigirán en una sola dirección, la de su conocida neutralidad, sin exageraciones, eufemismos, tópicos, oportunismo, con su equilibrio reconocido, los méritos de este deporte en estas circunstancias, este campeonato, se camuflaran en eso tan hispano que es alejarse del punto medio. Yo me conformo con ser noble & bélico el resto se da por añadidura. No hemos ganado ya me he enterado.