No a los equipos africanos, si a muchos del continente anfitrión, nada de sorpresas.
Me temo que acerté en mis pronósticos para cuartos, basado en la igualdad de lo equipos y en ese toque de los "clásicos participantes" que casi siempre funciona en los mundiales, todo pendiente de hilos frágiles, de postes, de balones sacados en la raya, de ojos de halcones y en el fondo de ese factor llamado suerte que tanto pesa en los juegos.
El cansancio, la disciplina defensiva del contrario, el juego aplicado, la buena forma física, porteros que paran mucho y bien, están siendo factores que impiden que el otro gane, pero falta ese toque de calidad y distinción. Los eliminados se han ido dignamente, con la cabeza alta y el aplauso de su competitividad, y alguno con la sensación de que estuvieron a punto de rematar la faena, ante los equipos con figuras, con más historia. La impresión de una buena oportunidad perdida.
Al final los equipos que han planteado muchos problemas en una gran igualdad se van a su casa con la imagen del penalty mal tirado en la cabeza y todo se evapora, el mundial continúa.
Los favoritos que tienen un día no muy bueno, y eso siempre ocurre en un mundial, son capaces de ganar. En esta oportunidad me da la impresión que esos favoritos no tienen margen de maniobra porque están agotando sus recursos. No se si Brasil, Argentina o Alemania serán capaces de ir a más en los tres últimos partidos. Pueden ganar el mundial alguno, pero los tres son equipos incompletos y con jugadores decisivos.
¿Quién pasará? ¿Quién es más favorito?
Me debería decantar por mi pronóstico previo de hace días, pero me gustaría que cambiasen las cosas, que llegase un soplo fresco que Bélgica, Costa Rica, Francia y Colombia pasasen a semifinales y revitalizasen el fútbol. No creo que suceda pero sería hermoso.
¿No es un juego de imprevistos?
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