No conozco los nombres de muchos, demasiados pueblos de España, en Granada hay uno llamado Ventas de Huelma, municipio de no más de setecientos vecinos, que de pronto pasa a ser primera página por un felino negro, suena que nos han dado gato por pantera, son esas noticias que abundan demasiado para llamar la atención en todos los ámbitos. Yo de especialista en grandes gatos nada, si confieso que me apasionan los leones, ellos y ellas, quizá más ellas, son tan coherentes, sencillos, dignos, honestos, sin pretensiones, con la ideas muy claras que casi entiendo porque no tienen cerebro o la perfección de su materia gris. Desde pequeñitos saben de que trata su existencia, es muy dura, les cuesta sobrevivir, pocos llegan a adultos, necesitan mucho intentos en sus cazas para comer, se apoyan mutuamente, son capaces de matar a las crías de otros, no matan por gusto, no hay nada personal pura supervivencia. Supongo que no hubiesen confundido a una leona que se pasease por la serranía. Mientras seguimos perdidos entre felinos ha fallecido la juez, jueza si lo desean, Ginsburg, icóno feminista, derechos de la mujer, y sobre todo una mujer inteligente, digna, luchadora, honesta, capaz de escuchar al oponente, involucrada en hacer unos USA más justos, utilizada por la política como la política utiliza lo que puede sin la coherencia de los leones. El tiempo pondrá a cada uno en su sitio y en periodo electoral todo será más utilizado, mientras esperamos la confirmación de los expertos sobre nuestra pantera granadina, no se trata de los galgos o podencos de Iriarte en esos temas la capaz juez Ginsburg no se confundía, aquí nos confundimos a menudo.
sábado, 19 de septiembre de 2020
La pantera de Granada
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