Hace frío de otoño en Madrid, volvemos a un partido europeo, bastante decisivo, traicionero, o no, se verá cuando llegue el pitido final.
Seguimos sin gol, no hay jugadores a bordo que lo garantizen, habría que buscarlo en el sistema, el dibujo, sin descuidar la defensa. No me va a escuchar Zidane, pero el 4-4-2 que permita llegadas claras, contrataque y centrocampistas que aguenten el ritmo, todo con Valverde como eje, sería mi opción. Ni tengo capacidad ni me pagan por ello, escribir es sencillo.
Los fieros turcos de la jornada, la mayoría no otomanos, son jugadores de vuelta, desconozco si motivados, que no se cuanto aguantan, lo que pueden ser es peligrosos.
El Madrid ha sido muy superior, iban 13 minutos y llevabamos tres goles, poco se puede añadir, gran eficacia. Luego, ha desaparecido el rival, y el Madrid un poco, sujetado por Kroos y Valverde. Hemos visto a Mendy, que me gusta, a Modric y a Isco que ha subido de tono sus actuaciones anteriores. El Galatasaray se dedicaba a contener, evitar, sin crear peligro.
Al final 6-0 con triplete de Rodrygo que tiene buena pinta, debutaba en Champions en Chamartín. Dos de Benzema que superaba a don Alfredo con respeto y timidez.
La culpabilidd del resultado final es de varios factores, el turco enemigo ha tenido su culpabilidad también.
Me quedo con los jóvenes, los noveles, que tienen muchas de las cosas que a mi me placen, aunque necesitamos más como estos,no exageremos.
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