¿ Cómo será la próxima película de Bond, James Bond?. Discuten porque hay que acomodar el personaje a los gustos actuales, como siempre, adaptarse. Tampoco sé en este momento cual será el resultado de la segunda vuelta en Francia, repito que no es España ni el sistema es igual. Mientras he asistido a una conversación de vinos, donde se hablaba de los cambios en UK, del lamentable estado de Biden, de lo que le presionan desde The New York Times, desde otros sectores, de las alternativas o no, de estos temas de actualidad fuera de las capacidades de Muñoz Escassi, jockey, potente, que no anda escaso, posible candidato a Bond o a The White House ¿ Por qué no?. Alguien mencionó la Guerra Fría lo sencillo que era todo. Los dos bandos nítidos, aliados antes, una vez derrotado el del bigote gracioso, enemigos, y la amenaza posible de la destrucción masiva que nadie quería usar. ¡ Qué tiempo tan feliz!. El caso es que en aquellos largos años, por diversas razones, por los buenos se hacían pasar los comunistas, soviéticos, grandes amantes del prójimo, cualquier tipo de socialismo. Se imponía el miedo, el mismo que se utilizó contra el fascismo derrotado.Todo me parecía un show consentido por unos y otros, cada uno a lo suyo, en espera del colapso de ese gigante falso llamado URSS. Esto lo aprendí en 1987, cuando asistí a las reuniones sobre la amenaza. No tenía mucho sentido pero aquel equilibrio interesaba a todos los actores principales, sobre todo a dos y ¿qué otra cosa se podía hacer? Dos años más tarde los acontecimientos nos dejaron huérfanos ¿ Quién es mi enemigo?
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