Resulta curioso lo que pueda llegar a significar una entrevista, en este caso la realizada al ministro de Economía del reino de España, por Jorge Bustos; un periodista que, al igual que Manuel Jabois, me parece que tiene nivel, inteligencia, honestidad y el deseo de buscar eso que llaman la complicada o simple verdad.
Han sacado muchos titulares incluso una semi encuesta, que se llevan mucho, para evaluar las consecuencias en la opinión pública.
Y vuelvo a mi tesis congénita: en las España tratamos la política como los programas mañaneros los asuntos del corazón-sociales (puro cotilleo) o los profesionales del día a día la actualidad del fútbol ( hablar por hablar).
Todo español se considera un tertuliano en potencia, algunos hasta gratis.
Independiente de lo que se opine del ministro como ministro de Economía y Hacienda, no ha dicho nada raro o absurdo. Puede que caiga mejor o peor (dicen que es el que peor lo hace, el más atacado por todos los actores), pero sus opiniones sobre colegas, ex presidente, ex colegas, posiciones, economía, comunicación, no expresan nada nuevo; simplemente llevan su estilo y demuestran sentido común.
Tras la entrevista, el tratamiento, para intentar reflejar un caos interno en el partido que gobierna y exponer sus divisiones en periodo casi electoral, puede que sea verdad, pero si yo fuese político bendeciría al que consigue que se muevan los cimientos, si se logra espabilar al personal. Es mejor ir de cara.
Creo que es de agradecer que un ministro, sobre todo el de Hacienda, demuestre sentido común. La frase, con sorna, de las razones de su elección, no tiene desperdicio, y es que las debilidades humanas son iguales para todos.
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