Reconozco que los males que veo reflejados en el día a día no son novedades, llevan ahí siglos. Seguramente Sócrates ya luchaba contra ellos, antes de ser sentenciado a muerte, ya mayor, como toca pelotas nacional entre los sabios, el mismo no se consideraba sabio y a lo mejor, por ello y otros factores, lo era de verdad.
Lo que no existían eran las redes sociales.
Hoy he recibido, entre muchos, dos, no sé cómo llamarles...pero son vídeos o escritos largos de esos que te piden que te posiciones.
En uno una señora, que se supone es graciosa de profesión, aparece hablando del presidente, estornuda y se limpia sus mocos con la bandera nacional. No sé dónde está la gracia. No entiendo el mensaje, excepto me pasó por el arco del triunfo todos los símbolos.
El otro es una larga disertación sobre Pedro J. y algo que va a salir - con pruebas- demostrando que los atentados del 11 de marzo 2004, fueron un complot o trama entre el gobierno de Marruecos, ETA y el PSOE. Son solo dos ejemplos.
En uno queda retratada la persona que seguramente está muy orgullosa de su genio innato y falta de gracia y dirá que no hay que tomarse en serio nada.
El otro pone en tela de juicio no a la banda terrorista que tantos asesino, ni al gobierno de un país vecino que juega sus cartas por intereses-como todos-, pero que cuesta creer llegue a intervenir en una acción de ese tipo. Además señala a uno de los dos partidos que ha estado en el poder desde 1977 le hace partícipe de semejante acción.
La gente lo manda, pide que lo manden y se queda tan tranquila.
No me extraña que Sócrates se fuese, cansado, diciendo que un filósofo no le tema a la muerte ni a la estupidez humana ( esto último es mío).
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