lunes, 8 de enero de 2018

En Hollywood llueven Globos de Oro a gusto de todos, aparentemente.

Caen unas cuantas gotas, nieva en las Españas y no oigo agradecimiento sino lamentos,  cuando probablemente deberíamos tener este tiempo durante meses para compensar la escasez. Nos hemos hecho  flojitos.
Llegan los Globos de Oro, en Hollywood, y la política, las apariencias ocupan los medios.  Todos vestidos de negro, color elegante, asociados a actos fúnebres. En USA vende mucho aparentar, ese magnífico país está sumido en sus miedos, traumas, falsedades, donde lo que parece es más relevante, vital, que la realidad misma. Como el ingenio no sobra en el presentador, Seth Meyers, crítica lo criticable (ya muy repetido) sin ese toque fino y delicado. No es sencillo, no pueden hacerlo muchos en su profesión. Racismo, acoso, los Estados Unidos llevan toda su vida peleando contra el racismo intrínseco en sus ciudadanos. Cuando la cámara repasaba a los asistentes y nominados (ninguno afectado por un escándalo), pensaban que al ir de negro eran puros, son hombres, poderosos, famosos, pero no han sido detectados ...todavía. La iniciativa "Times's up" va a trabajar para que salgan muchas cosas como Elliott Ness y sus Intocables, y es que lo de prohibir en USA es como un culto que casi nunca soluciona. Siempre hay algo que prohibir y si no las apariencias cubren la mierda.
Volviendo al cine, no es fácil completar un buen film. Las películas si responden a lo que he visto, las que considero más redondas, en su totalidad, superan en premios a esas otras llenas de experiencias, deseos, nombres, como The Post, que por hacer política se acaban de prisa. Mejor "Lady Bird", "Three Billboards...", dos pelis que he visto y son en realidad las que más me han gustado hasta ahora. Actores y actrices hay muchos, Goldman, McDermond, Ronan, los Oscars se encargarán de dictar su ley, allí se volverá a hacer política, a vestirse de negro o a lamentarse en público de nuestras atrocidades y pecados para volver a pecar en privado, gran hipocresía, gran atrocidad. Para hacer política ya está Mrs Winfrey, que si fuese presidente resolvería todos los problemas como si fuese un programa de televisión o sea otra versión de Trump, para una Native American y mujer, al parecer de eso se trata.

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