Valencia, el campo del Valencia F.C., es uno de esos lugares donde más odian al Real Madrid, donde más rabia nos tienen, lo he presenciado en vivo. Así que este partido venía muy mal porque los ches dicen que juegan muy bien esta temporad, con Marcelino su entrenador, que parece que es otro de los que ha inventado el fútbol, no como Zidane que bastante tiene con detener la sangria. El caso es que salimos a otra prueba para conseguir plaza europea de Champions.
Esta mañana, en Chiswick London, he visto a un pequeño de dos años y medio batirse con un inglés mayor. El futuro que llega. El anglofilo se iba hacia la portería rival y el pequeño, con coleta a lo Bale, le ha agarrado como todo medio centro que se precie. El inglés se ha ido llorando y la gente se reía del serio semblante, instinto, comportamiento del bravo nuevo “ Xabi Alonso”.
Me voy reconfortado al pub.
Equipo titular, sin S. Ramos que últimamente no da para mucho y se vuelve a lesionar. Primer tiempo donde veo a un Valencia no tan grandioso como lo ponían. Mucha pelea, lucha y la impotencia de los locales que se parten la crisma cuando tratan de reivindicarse ante la camiseta que llevaron varios de ellos, sin éxito y continuidad. El caso es que acertó CR7 en los dos penaltys señalados y ellos no, fallaron o acertó K. Navas, que estuvo correcto.
El público, como si estuviese en Fallas, se dedica en el segundo tiempo a la remontada porque saben que rara vez se encontrarán un Madrid tan blandito. Faltando treinta minutos meten un gol en un córner mal defendido. No jugamos bien del todo, ellos empujan hasta romperse. Tardan los cambios nuestros.
El 1-3 es una jugada excelente Asensio/ Marcelo y el 1-4 otra muy bien finalizada por Kroos.
Tres puntos al final, de eso se trata.
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