Batallitas mañaneras.

No es nada fácil averiguar la verdad y para añadir más dificultades a la misión se puede uno preguntar:

¿Qué es la verdad?

La verdad pienso que debe ser simple, sencilla, nítida; eso en la búsqueda de la verdad se convierte en el "objetivo". 

En el caso de los asesinatos atribuidos a la invención calificada como Jack the Ripper, que escribíamos ayer, habría que encontrar al asesino (si fue sólo un a persona) y luego explicar (si son explicables ) sus motivos. No apareció el culpable, se dijeron-escribieron demasiadas cosas, la confusión se mezcló con la niebla de London y alguien salió beneficiado, escapó sin una rozadura.

Ayer en una ceremonia religiosa me dio por intentar explicar a un estudiante, de veinte años, La Guerra Civil Española, sobre la que tanto se ha escrito; supongo que es como si alguien me explicaba a mi, a su edad, la guerra de Cuba y Filipinas. Trataba de concentrarme en la razón fundamental, el "objetivo" porque estábamos rodeados por las tumbas de puede que más de 1.000 víctimas de ambos bandos. No creo que entendiese mucho, ni desperté su interés, porque algo clave como la influencia del comunismo de Moscú, Unión Soviética, y su doctrina es algo casi obsoleto en la Europa democrática post WWII; sólo revivido por proclamas de Podemos, Unidos Podemos o cualquiera, que incluso desde las tribunas se limite a berrear.

En esta pelea Hillary vs Trump si está claro el objetivo: La Casa Blanca y el modo: cualquiera que no sea detectable o incluso los detectables, que ya nos encargaremos de crear la niebla de Jack The Ripper.

Luego va el ex Sánchez y se suelta la lengua ante un periodista que está de moda. Se le ve dispuesto a cantar y entona su canto del cisne/sirena. El objetivo estaba claro: La Moncloa. Como sea y con quién sea, contra el Comité Federal, mintiendo.

Vaya, me parece que iba a tener razón el Conde de Romanones, al fin y al cabo estuvo mucho en política, eso del poder gusta mucho, más que el j..., muy fino este aristócrata.