Esta ciudad de Londres está repleta de gente que seguramente votaron contra el Brexit. Como turista te los encuentras en muchas partes y las razas florecen aquí en número interminable, mezclados o no suficientes mezclados.
Hubo un tiempo que este Reino Unido era realmente el país más poderoso, rico e influyente. Sus edificios demuestran un lujo extraordinario al igual que esos palacios que se ocultan entre la campiña británica y ese buen gusto que las películas nos ofrecen. Como español me cuesta imaginarme esos tiempos en los cuales el rey, emperador, de España, mostraba su influencia y miraba a estas latitudes con cierto interés. Seguramente hacía mucho frío, o más frío; llovía a cántaros, la dureza de estas tierras en invierno fueron forjando una forma de ser, manteniedose aislados, protegidos desde la distancia. Son listos, ayudados por esa insularidad, y se han hecho muy suyos.
De estas cosas te das cuenta cuando te topas con un inglés y eso es más complicado ya que no los ves en el día a día.
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