Enola Gay.

Enola Gay era un nombre de mujer, concretamente de la madre de un piloto y una madre es algo muy especial para un hombre, para cualquier hombre. Sin embargo su nombre ha quedado ligado a un hecho de terribles consecuencias

En Agosto de 1945 una decisión ejecutada con exactitud y profesional precisión, convulsionó a un país que aguantaba como podía sin rendirse. Japón tuvo que enterrar su orgullo y claudicar. Muchas cosas habían pasado desde aquel Diciembre de 1941 en Pearl Harbour. 

Casi 69 años después, ya no quedaba vivo nada más que uno de los doce  de la dotación de la aeronave. Ahora ha fallecido el último testigo, el "navigator" del B-29, que  jugó un papel fundamental para alcanzar el objetivo con precisión.

En el cuerpo de este oficial de las Fuerzas Armadas de los USA,  su vida se prolongó hasta los 93 años y seguramente tuvo tiempo, en distintas fases y con perspectivas diferentes de pensar en lo que les habían ordenado, cumplido con disciplina militar y... sus consecuencias, no sólo en la población del Imperio del Sol naciente, sino en todo el mundo.

El, junto a sus compañeros, contempló la nube que cubrió la ciudad de Hiroshima. 

Lo curioso es que nos impresiona terriblemente y las imágenes perdurarían en su retina al igual que en todos los que las hemos contemplado por televisión. Al final, de pronto y en muy poco tiempo, murieron cientos de miles de personas y otras muchas sufrieron daños irreparables que no tuvieron cura. En las guerras mueren muchos más, y en esas islas del Pacífico se ahorraron muchas vidas con las bombas lanzadas como aviso de lo que podría llegar a ser, sin embargo no hemos aprendido casi nada.