Emigrantes.

 

 

Lo políticamente correcto, lo populista, lo de siempre, incrementado en este mundo que hemos construido entre todos. La emigración es un problema cierto,  porque no se puede admitir a todos, porque los seres humanos quieren vivir, prosperar, porque se restriega el bienestar. La riqueza del mundo occidental llama ante la miseria, la gente deja su hogar, vida, familia, todo, con esperanza. Lo curioso es haya quién diga que controlar las medidas son concesiones a la ultraderecha y ahí queda la frase.

Escándalo es un escándalo. Bruxelles desmadrada, ya no es lo que eran aquellos Flandes aquellos tiempos de La Kermesse héroïque  aquel siglo XVII.  Película que deberían ver todos los españoles, porque es de 1935, franco-alemana, y nos pone muy bien. Aquellas mujeres flamencas, de mando, valor, belleza, pragmatismo. Ahora en el Parlamento Europeo te pueden acosar no esta  aprobado, pero la política te hace hacer cosas que no querías. Al fin y al cabo ¿ qué se hace allá?. Oiga ella no quería, en este caso él, que decían Martes y Trece pero se referían a Eva , sus dudas y algo de lotera de Madrid.

Por supuesto el film que menciono no gusta nada en la hoy Bélgica, ni gustó en su estreno por aquellos de los colaboracionistas y ese ser y no ser que perdura en nuestros días y que les permite ser sede de todo con sus lluvias, sus mejillones, las frites y Tintín el único belga famoso que nombra el pueblo llano.

Por cierto no se engañe nadie la nominación a los Oscars es un premio ya, con demasiada política o cada vez más. Si no gana la actriz española, que no creo porque no es la mejor ni de lejos, no será por declaraciones sobre el Islam o los afroamericano, que no traten de confundir que bastante está uno confuso.