Declaraciones, declarantes (XXXIX día encierro)

La Declaración de Independencia de las colonias de América, es un precioso documento, además de necesario, útil y preciso, bien escrito, su pluma fue Jefferson para el primer borrador. Trece eran trece las colonias de América del Norte que decidieron independizarse de Gran Bretaña y su rey George, al cual consideraban un tirano. Se llamarían los Estados Unidos de América, una república de leyes no de personas, que diría Adams. Corría el siglo XVIII, la Revolución en puertas, la guillotina funcionando en las ciudades de Francia, Europa convulsionada, comienza la Edad Moderna, 1789. Hay mucho escrito sobre aquellos años, ideas precursoras, personalidades, hechos. Hubo 56 hombres, porque eran del sexo masculino (independientemente de su orientación) que firmaron la Declaración de Independencia, no la Constitución, el primero en morir John Morton (Pensilvania) en abril 1977, 52 años. El último  Charles Carroll (Maryland) en noviembre 1832, 95 años. Thomas Jefferson y John Adams los penúltimos, murieron el mismo día 4 de Julio de 1826, 83 y 91 años respectivamente. Esos 56 políticos, unos más decisivos que otros, eran caballeros del norte o del sur, muy preparados, algunos extraordinariamente preparados. Diferían en muchos aspectos fundamentales, la esclavitud pendiente de resolver costó una guerra civil, los ingleses no cedieron a la primera, hubo una guerra. De esos 56 dos fueron presidentes, precisamente los que fallecieron el mismo día, rivales, enemigos, amigos, muchas cosas, sobre todo se respetaban, sabían valorar lo que cada uno tenía de bueno para su país, en construcción. Además el destino quiso que muriesen un cuatro de julio, por esos caprichos que rigen los movimientos de los humanos, quizá como homenaje a su buen hacer. Comparaciones odiosas e injustas. Parecido a estos lares, donde te los imaginas telematicamente compartiendo sus ideas, discrepando, llenos de sabiduría y patriotismo.