El y ¿ ahora qué?

No me refiero al resultado del concurso de Eurovisión, que es como la Desunión Europea, con más no europeos, todo politiqueo. Se puede hacer un curso intensivo cutre de relaciones internacionales escuchando la votación. 
Hay participaciones que llegan hasta Australia, tan lejos. Se canta en inglés, se "castiga" al reino Unido por el Brexit, se vota en plan compi y amiguete, con mezcla de modas y odios ancestrales. Al final es un puñetero concurso, donde por cierto la canción española no me gustaba, ni lo del dúo, ella si. 

Claro que debería haberlo visto, saber de música e importarme, para opinar con propiedad.

Despejado lo de Eurovisión, me refiero en realidad a lo del presidente de la Generalitat, que parece va a ser elegido en segunda ronda. Menudo marrón hay en aquella convivencia y encima el FCB perdió.

La herramienta del 155 es algo más que una llave inglesa.

El candidato es otro cansino más totalitarista, anticuado, extremista y que desconozco a quién votaría en el concurso de canciones mencionado. Eso si su discurso, con una frase en inglés, pone a los demás, a los no independentistas ( y sus votantes) en una situación como la que llevan viviendo ya hace tiempo. Esto son lentejas colega, si quieres las comes y si no las dejas. Eso si lentejas catalanas auténticas, que como todo el mundo sabe son las mejores del planeta, lo eran incluso antes que existiesen las propias alubias. En Cataluña es todo tan grande, bonito, perfecto, que nos hemos inventado una democracia, que ya los griegos nos quisieron copiar. Si vives en Cataluña no se si se ve de otra forma, desde aquí, mi pueblo, suena ridículo, tragicómico, patético, pero es real. Un tipo-candidato-presunta marioneta lo está diciendo y se olvida del resto que no han votado nada más que normalidad.