Visita Donostiarra.

Llega la Real que juega bien, buenos atacantes, variados, su entrenador Imanol me gusta no sólo por armador de equipos sino por como se expresa, cómo pierde, vienen en alza de resultados, para nosotros es difícil porque nunca se sabe como saldremos ni quién hará los imprescindibles goles, recuperamos jugadores que obviamente necesitan tiempo; los rivales directos están en un nivel extraño, ambos han ganado con sus cosas ante otros que sorprenden negativamente en esos últimos encuentros, muchas veces se olvida la oposición, resistencia, que presenta el oponente. Es importante como afecte a la moral, lo físico, las ganas, hay mucha irregularidad. Muy superiores en la primera mitad ante un buen equipo, buen ritmo sin exagerar, todo el mundo ha corrido, nuestro teórico nueve como un pollo decapitado, los delanteros no marcan, nuestros tres mosqueteros siguen siendo lo mejor e Isco cual D'Artagnan va uniéndose, aún así ves más fácil que te hagan un gol en una contra que nosotros traspasemos la raya sin que intervenga el VAR. Esto del gol que no ha mucho nos reprochaban, lo más difícil en este deporte, era lo único que teníamos es hoy una ausencia trágica. Lo siento profundamente, no entiendo a Zidane, no se las razones por las que ha cambiado el dibujo al descanso, aún sabiendo que no hacemos gol, ha dejado a tres centrales solos, con las bandas para que llegase claro el rival y un remate tipo Marcelino de Portu, de esos de una vez en la vida, significa gol, estas cosas me crean muchas dudas o más, dentro de las carencias. Cambios, seguir intentándolo, sin peligro, con ganas y gol de Vinicius que casi no entra. No hay nivel.