Visita a Mendizorroza amodorrados.

Volvíamos a un campo de los de antes contra el Deportivo Alavés y un público entregado. Los locales se presentan sin Llorente que es una promesa nuestra y manda mucho y bien.

Veo el partido y pienso: El fútbol no es muy justo. Me lo vuelvo a pensar, recapacito: El fútbol son goles, sobre todo son goles, me repito. 

Hemos jugado muy mal la primera mitad y acabado 1-2. 
El Alavés con orden, disciplina, replegados y con velocidad en la transición, Theo sobre todo, no han creado peligro específico, no de oportunidades claras o intervenciones de Navas sino de errores nuestros. La impresión es que ellos estaban más en el asunto.

No me ha gustado nada el Madrid o muy poco o en pocos ratos; ante otro rival lo pasaríamos mal si no espabilábamos. Nadie presiona o presiona alguno sin coordinación y poco se recupera.

Al final 1-4.

Acabo antes diciendo los que me han gustado, quizás Kovacic en su totalidad de partido. 

Los demás todos con errores, de entrega, imprecisiones, sin presión, sin apoyarse; nadie rebasa a  su par ni nadie mete un balón entre líneas; la defensa insegura y el medio campo arrastrado por las vueltas de peonza de Isco y el despiste, (cosa no habitual) de Kroos, que siempre estaba tapado. 

Cierto que CR7 metió tres y falló un penalty, marcó otro; hacía 26 partidos que no nos pitaban uno. Marcelo, varios errores de entregas y luego dos asistencias; Varane torpe, Danilo lento en su defensa, Nacho correcto y Bale volátil.
Navas muy correcto, eso es bueno.

Cuesta decirlo porque no puedo asegurarlo, pero es como si volviesen a pensar que el rival está chupado y no hay que esforzarse.

Lo siento por Benzema, pero está muy mal y Morata le mejoró, ahora mismo no debe haber dudas sobre quién es el delantero centro.
El que sabe la verdad de todo lo que ocurre es Zidane y dentro de poco llegarán las grandes pruebas; hay tres partidos con rivales buenos por la proa y dos son a domicilio.