Cantidad versus calidad.

En el toreo un Curro Romero destapaba el tarro de las esencias a cuenta gotas, como el beso de una belleza eterna.

No acabaremos nunca de tener estadísticas sobre el año pasado; hay una buena noticia, o mejor que mala, el paro ha caído en España. 

Es curioso porque recuerdo el año 2012, crisis a tope tope, la sensación que percibía en mis compatriotas, y en realidad no veo mucha diferencias. Me da que todo sigue casi igual, los hoteles llenos, las vacaciones a tope, gente de un lado para otro, terrazas por todas partes, menos frío, nada de nieve y estaciones de ski.

Supongo que la calidad del empleo es otra cosa, pero cuando se habla de calidad todo es más difícil de condensar. El eterno dilema, cantidad versus calidad. 

El caso del YAK-42 y nuestros 62 muertos también revive tras el dictamen del Consejo de Estado, con una dureza y aspereza brutal sobre nuestros modos y fondo, aunque nada comparado con la pena de aquellos que perdieron a alguien en esas montañas de Turquía.

En Washington, donde se preparan los actos de la inauguración, va a haber una gran demostración de mujeres contra Trump, no sólo mujeres; conozco a alguna que va a ir y saldrá, ya lo creo que saldrá en televisión. veremos si las imágenes de los tiempos de Martin Luther se quedan pequeñas.

Se comenta la noticia de la dimisión del embajador del Reino Unido ante la UE (Desunión Europea) antes de empezar el proceso, del Brexit, en detalle. No están preparados ni en equipo ni en ideas o conceptos, porque simplemente ha sido una decisión política sin meditar. Hay un poco de caos, cosa raro en los de las islas, veremos como salen del proceso.

No importa, les importa poco, seguirán tan felices con su Premier, su reina (el sucesor no está claro) y su sentido de la vida que normalmente les ha dado excelentes resultados.

Como se ve el mundo a lo suyo.