miércoles, 22 de julio de 2020

La máscara de Macarena.

Aquí nadie se quita la máscara sea o no sea obligatoria, la del coronavirus es de usar, lavar o no, tirar, la de la vida nos hemos ido acostumbrando a ella como en carnaval.
Reconstrucción, reactivación económica, reconquista, don Pelayo, nombres, referencias, suena todo a propaganda, en un repetir, repetir, sin saber a ciencia cierta que se va a reconstruir, reactivar, no digo restaurar porque nadie explica ni la idea anterior. el caso es que dan cifras sin que aparezca nadie que explique nada, que lo importante es repetir que se ha conseguido el objetivo que es que te ayuden (rescaten) sin que te limiten como nación soberana como vas a utilizar esos fondos que se volatizan. Aparece un tío serio, con cara de serio, como si hablase en serio, fuese en serio, va y te anuncia el milagro, eso que no es creyente. Salen los de las Cortes, diputados, que parecen palmeros de los del Río cantando Macarena. Yo no conocía esta canción, la descubri en medio de unas fiestas de cartagineses contra romanos, Aníbal y Escipión dando a su cuerpo alegría Macarena. Luego en US los tiempos de ese señor llamado Clinton, NBA o NFL,  especialista en encontrar la cuadratura del círculo cuando se trataba de cuestiones sexuales, apreciaciones, conceptos o prácticas que ha conseguido que le mantengan vivo, no como Epstein, a pesar de sus amistades peligrosas, otro tipo serio, los dos muy serios, uno muerto el otro dando a su cuerpo alegría.No somos serios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario