Hoy las ciencias adelantan

En Washington DC el pronóstico meteorológico es de frío, normal en enero, nublado, no ese viento del norte que estremece cerca del Potomac, un nombre indio, hermoso. Los asistentes, y asistentas, llevarán termales para que no comiencen a temblar, el electo tiene sus años, no se yo si iría normalmente a una ceremonia de este tipo, con esa climatología, sino fuese elegido, obligado, lo hará encantado. Se habla mucho de la edad del presidente electo, no se si es tan relevante; hace años llegó Reagan, que siempre me pareció muy flojito como presidente, y como actor, hubo coincidencias mundiales, circunstancias, debilidades soviéticas, fin de ciclo y a su edad cuatro años después resultó reelegido. Hoy las ciencias adelantan que es una barbaridad, más que en 1980. Podrían poner la música de Bretón, "La Verbena de la Paloma" en la escalinata del Congreso atentos a cualquiera con o sin cuernos que pretenda llegar a donde no está invitado. El caso es que se va el indeseable de Trump sobre todo por sus formas, nadie ha analizado sus decisiones políticas con cierta profundidad, interesan sus Twitters, entramos en el mundo de The NYT,  esa mezcla de mundo ideal donde todos arreglan los problemas de todos, se mantiene el poder adquisitivo, la seguridad, los enemigos no existen, somos buenos, no criticamos a los nuestros, no te apartes del guión.