Juego de tronos y Penny Dreadful en Maracaná.

Don Vicente del Bosque se convirtió en el alcalde de Villatripas de Abajo y les dijo a sus muchachos:

-Hay que vencer o ganar
¿Estais dispuestos a todo
por sacudíos el lodo
de esa equipo Afro...leches?
-Marqués lo que nos eches.

Replicaron los jugadores, antes de saltar al campo en el último entrenamiento, con Chile en el horizonte.

Continúan los partidos del mundial de Brasil en la búsqueda del trono, en ese juego de tronos que se repite cada cuatro años y cuyas circunstancias varian mucho.

Lucha confusa porque no hay grandes diferencias y todo está muy abierto, las grandes individualidades no tienen equipo, y los equipos entrenados, con ideas claras resisten. Como en la serie televisiva, te entretiene, mueren casi todos y no se sabe bien a donde vamos, ni quien acabará siendo el rey o reina.

Los monstruos, creados, ficticios o novelescos aparecen en nuestras mentes como en Penny Dreadful, sorprendiéndote todos juntos, frecuentando salones y metiéndose en tu casa, sin llamar. Conviven en la mente de los españoles, la confusión y el miedo.

Los temores hay que desterrarlos. Llegado este momento hay que jugar al fútbol, los que mejor estén ahora, olvidarse del pasado porque el partido se juega hoy

Nunca he sido fan de Del Bosque, no creo que sea lo que yo entiendo como un buen entrenador/creador, él no crea un equipo sino que acumula jugadores y el ambiente es bueno. Van a ser ellos lo que decidan y ellos tienen que darse cuenta si pueden o no y ceder el puesto a otro si no pueden. Los servicios prestados son prestados, forman parte del pasado y un jugador sabe mejor que nadie como está de forma en la actualidad.

Los defectos de España se vieron incluso en el primer tiempo contra Holanda cuando jugamos mejor. Todos los convocados saben jugar al fútbol de alto nivel. No podemos conceder tantas ocasiones, hay que apoyarse más, ser solidario y sacar lo que se lleva dentro.