sábado, 1 de octubre de 2016

A vueltas en el tiovivo del PSOE.

Me da pena porque es un partido que defiende a todos los españoles bien , mal o peor, a lo largo de su historia. Menos mal que estamos en 2016 y los años treinta quedan para películas de blanco y negro o memoria histórica parcial.
Los del PP están aliviados, contentos y ... asustados. 
Es como si al FC Barcelona se le lesionasen Messi, Neymar, Suárez, Busquets,  cogiesen al presidente con un maletín en el Prat y al de comunicación en una orgía variada; los del Madrid, incluso los aspirantes del Atlético de Madrid, con el Cholo a la cabeza, pedirían prudencia y este ya no levantaría tanto las manos en su estadio.
La situación es sumamente delicada, pero para España no sólo el PSOE.
El secretario (todavía) Sánchez estuvo patético ayer, en su línea de no aportar y desviar, creo que no da para más. 
Demasiado hablar de Rajoy,Rato y Blesa ( a ver si les aplica de una vez la ley) y más chanchullos diarios; se le llena la boca con falacias y demagogia de izquierdas y derechas y parece que su objetivo y gran aportación mágica es que su partido se llamase Partido Progresista...y lo demás sobra.
Piensa que repitiendo, diciendo lo de progresistas, lo de izquierdas etc...se arregla todo o ...le votarán a él los votantes sabios, ingenuos y fatigados. Su discurso es incoherente, vacío y ofensivo a la inteligencia del hispano medio.
Sin embargo hay algo que no entiendo.
No estaba yo allí y no se lo que decidió el Cómite Ejecutivo en su reunión decisorio, Sánchez medio argumenta (tampoco es claro ) que el NO a Rajoy era la única salida, nada de abstenerse en una segunda votación, por lo tanto elecciones y de ahí el famoso trilema. Luego puede que haya maniobrado para conseguir ese gobierno de progreso que no sabemos a donde lleva.
En el Comité ese, debió ACLARARSE que si había segunda vuelta la posición sería de abstención para evitar las terceras elecciones y que haya un gobierno por un tiempo, que eso no significa apoyar a Rajoy.
Y además, lo más importante, lo realmente importante no se pacta con nadie que no se pronuncie con claridad sobre el respeto a la constitución y las reglas del juego. El independentismo no aporta nada bueno.

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