Somos un equipo en transición con remoras, los que salen hacen lo que pueden. Como un boxeador que recibe, encaja, se cae, sangra, sin tirar la toalla en una película de Hollywood al final gana sin saber bien porqué. Ambiente, buena recepción al equipo, cambios en el Chelsea para corregir sus errores, nosotros la misma alineación de la ida con la baja por tarjetas. Han sido mejores en la primera mitad 0-1, afortunados en el rebote, un buen equipo en el campo que corrige sus errores, intensidad, disciplina y unido a nuestra inseguridad nos hace no jugar bien a merced del contrario, el resultado favorable, que es cosa débil, no ayuda a los jugadores, deben corregir a su vez, cambiar o que salgan otros que por lo menos estén haciendo lo que el partido requiere. En la continuación similar desarrollo, ellos mejor posicionados, sabiendo lo que hacen, mejor físicamente, banquillo de euros. Se acabó el tiempo reglamentario, 1-3, le anularon al Chelsea un gol, marcaron otro con otro rebote, volvieron a ser mejores; llegamos a la prórroga porque Modric dió un pase de maestro que Rodrygo ejecutó cuando perdíamos 0-3 trás la parada de Courtois. No tenía pinta favorable el tiempo extra como había jugado el Chelsea, el Madrid aguantó mejor no sé cómo, Vinicius en una gran jugada la puso en el punto de penalty y Karim no falló. El rival era el campeón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario