lunes, 13 de enero de 2025

El movil de Sánchez.


 

Un móvil no es sólo ese aparato que nos somete a diario, este no es el móvil buscado del Fiscal General del Gobierno, es también una causa un motivo una razón. 

Las razones o razón fundamental al menos para la bautizada Ley doña Begoña pueden ser interesantes, alucinantes, refrescantes... si las conociésemos.  Cierto es lo del silencio de El País , o medios próximos a Moncloa, a lo del viernes. Cierto lo de matar varios pájaros de un tiro. Sánchez esta en el gobierno por sus pactos con independentistas fundamentalmente, concesiones y porque le votan lo suficiente. En medio de sus pensamientos ¿por qué ahora proponer tal ley en plena cuesta de Enero?

Su deterioro en el poder, a pesar de su ordinariez, no ha sido contrarrestado por una oposición eficaz. Los medios, no los suyos obviamente, han ido sacando casos de supuesta corrupción que van minando la resistencia, cubren horas y páginas como ha sido antes con González o Aznar. Don Alfonso Guerra, vilipendiado antes ,por algunas expresiones ocurrentes, por los tiempos, como un demonio de rabo y lengua viperina, salió del Gobierno tras lo de su hermano y se fue. Sobre todo siempre fue un hombre digno.  Aquí yo no se si los asesores le dicen a Sánchez que lo de su señora tiene realmente mala pinta. Luego están los otros casos de ex ministros o próximos. Todo esto debe influir. 

Otro argumento, hay que cargarse a los enemigos más eficaces: prensa y jueces.

Sin embargo Sánchez lo que busca es seguir en el cargo, la continuidad que nos permita a todos malvivir en su mundo. La clave ridícula o no, esperpéntica o si, está en Waterloo, como viene siendo desde 2017. Es decir Puigdemont que quiere volver como si nada hubiese pasado, para ello presiona, no habrá presupuestos si este señor no vuelve, aunque también es fantasmón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario