martes, 18 de febrero de 2020

El ascenso del príncipe Andrew.

Da rabia cuando estás escribiendo y ocurre algo que borra lo que no has tenido la precaución de guardar. Es tu culpa, tu propia torpeza, hay que ser cuidadoso. 
No se yo si somos cuidadosos en lo que hacemos. Al leer que el príncipe Andrew, de Windsor, ha pedido que no le asciendan porque el horno no está para bollos, hay que controlar los escándalos, los de sexo o dinero, su vida, me quedo tranquilo, no ha sido cuidadoso pero no hay cuidado, porque por ahora se para el ascenso ¿para qué sirve que ascienda?
Además de cuidadoso deberíamos no tomar por incompetente intelectual al ciudadano, los gobiernos tienden a hacerlo, este de coalición en España, sigue con la costumbre. Plantean soluciones que suenan a imágenes de informativos que hay que vender, como la tasa Goggle o el imposible reto de gastar más, sin endeudarse, sin recolectar impuestos, cumpliendo con la UE, disminuyendo el paro. Seamos cuidadosos, no digamos al ciudadano lo que quiere oir, puede que un día se canse.
El príncipe Andrew no se si gusta del football, la Premier, además de los dólares y esas actividades lúdicas permitidas para él, hasta que salen a la luz, parando su progresión de carrera. La Royal Navy está en shock. Supongo que vería el partido del Liverpool que perdió 1-0 contra el Atlético de Madrid. Yo elegí el B. Dortmund vs PSG, quería ver a las grandes figuras no al mejor equipo del mundo, el imbatido. Vi a los alemanes ganar 2-1. une equipo fiel, consistente, contínuo, con un Haarland que me gustó, no sólo es un tipo grande y fuerte. Neymar y Mbappé son muy buenos, no parecen al 100%, cuando surgieron hicieron un gran gol, esborde, velocidad, letales. Quedan los encuentros de vuelta. Vamos a parar los ascensos por ahora que esto está comenzando.

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