lunes, 7 de noviembre de 2016

Un nuevo visitante.Coliseo romano VI.

Después de las lluvias vuelve el sol con frío a la sombra. 
Llega el visitante, el Leganés; de un pueblo de por aquí al lado; no recuerdo haberles visto nunca sobre esta hierba.
Sacamos un equipo equilibrado para lo que tenemos y se ve que permitimos jugar a todo el mundo, somos buenos anfitriones, educados y generosos. 
Llevábamos 25 minutos y el Leganés no me decía nada, un equipo "correcto", defiende ordenado, líneas tupidas, y no se proyecta en ataque, no dejan recibir y los del Madrid se van al suelo. 
Nosotros un equipo "plano" sin velocidad ni circulación rápida del balón, pocos desmarques e imprecisiones en el último pase; no se crean oportunidades, aburridos, sosos, sin chispa. Un buen pase (el único) de Isco y gol de Bale con rebote afortunado en la primera ocasión, minuto 37 y otro en la segunda oportunidad. Además del 2-0 nos llevamos tres amarillas porque protestamos ante tanta patadita.
En los segundo 45 minutos un poco de lo mismo, mucho más cómodos, para acabar 3-0. 
El Madrid defiende en uno contra dos y los que nos visitan lo hacen con muchos jugadores, cuando tengamos enfrente a delanteros rápidos, de calidad, nos harán goles.
Voy a personalizar un poco. 
Me gustó Bustinza, en los visitantes, en todas su facetas, dando leña, como sus colegas, también. Morata, que marcó, se pasó casi todo el partido en el suelo, empujado o por sus torpezas. Bale y Kovacic me gustaron, como Nacho y poco más. Isco me preocupa porque es incapaz de jugar al primer toque. Una alegría ver a Modric de nuevo y los cambios debieron producirse antes, al menos para refrescar.
Del árbitro no hablo, de este me entran ganas.
Nos vamos al parón como líderes, pero sin jugar bien ni continuo ni con solidez; en los próximos partidos se decidirá cual es nuestra posición real.

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