sábado, 28 de abril de 2018

Alcanzar el nivel de incompetencia propio.

Resistir hasta el final es una recomendación siempre, no rendirse, saber aguantar.
En la vida como en la mar hay que remar contra corriente o navegar contra el viento y la mar en contra, cuesta mucho más, se tarda mucho más. Hay personas, sin saber las razones, que casi siempre se ven en situaciones difíciles, comprometidas y en pocas ocasiones gozan de facilidades. Por ejemplo está el caso de la salud física o mental, las penalidades que se arrastran en silencio, con dignidad. Para ellas todo mi respeto.
No todos jugamos con las mismas cartas. Por eso me cuesta cada vez más juzgar, ya que nunca se es capaz de conocer los detalles. Hasta las trifulcas familiares, los comportamientos íntimos son juzgados parcialmente, disculpando a unos y cebándonos con otros.
Veo claro el consejo de aguantar y resistir, pelear cuando las condiciones son adversas y todo se derrumba, pero al mismo tiempo hay que mantener la calma y no desesperar y esa es una virtud, un espíritu que se tiene o no se tiene.
Hay un ejemplo futbolero de comportamiento y es el del entrenador del Atlético de Madrid, que hace lo mismo que hacía cuando era jugador.: frustrase en la derrota. Entonces en su impotencia daba patadas, insultaba o protestaba. Ahora no da patadas, pero no sabe dominar sus frustraciones o controlar su límite, su incompetencia y sus capacidades. 
Si es el mejor entrenador para su club me parece estupendo, si no quiere "probar" con otro idioma u otra cultura también, él sabe que en Madrid se vive muy bien, se come mejor, buen ambiente, muy futbolero, el clima es dulce, y ser antimadridista acumula palmeros. Llegan estos palmeros y argumentan que en el club saben que está estresado porque quiere ganar algo, quiere presentar un título a su hinchada, las dificultades de retener sus figuras, de decidir quién juega, le rodean. ¿No es lo que quieren todos, ganar títulos? ¿Qué pasa con los entrenadores de semifinales de Champions o de infantiles o de Mundiales? ¿De qué hablamos?


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