miércoles, 2 de mayo de 2018

Semifinales Champions vuelta. Sudor sin lágrimas.

Es el 1 de mayo, día del trabajo, obrero, y el Madrid me huele, que tiene que ser obrero esta noche. Se palpa un cierto temor, o inseguridad, en la cadena oficial del club más que en otros medios. El aficionado se cree lo que quiere creerse.
Ambiente fantástico, lleno, muchos alemanes, fuera del estadio también, entregados a la cerveza, el vino y las tapas, disfrutando sin entrada. El resto rendidos a la causa y sufriendo, sufriendo mucho, casi ciegos, en un partido que se hizo largo y corto a la vez.
He sufrido personalmente y creí que nos eliminaban. Ha habido desajustes continuos y no los hemos solucionado, aunque hemos mejorado en la segunda mitad. Teóricamente era un 4-4-2, sin embargo el centro del campo era suyo. El desequilibrio se producía por la derecha con el gran sacrifico de Modric y L.Vázquez fuera de su sitio muy atentos a Alaba y Ribery.
Emoción  a raudales, rival nivel semifinal y un equipo potente, que si contase con otros finalizadores, no el perdido rencoroso Muller, hubiesen podido pasar perfectamente.
Fenomenal K. Navas  (paradas decisivas), Benzema (goleador ), CR7 muy trabajador, Modric (fantástico en ayudas junto a L. Vázquez) y todos con corazón, eso si.
Regular Marcelo, dejó el pase del primer gol, perdido, sin forma, muy mal en defensa, de un lado para otro. El centro del campo un coladero o una zona de ellos, casi siempre con superioridad numérica. Me pregunté ¿quién es el 11 de rojo, que la toca tan bien? James, naturalmente.
Los alemanes peleando, arriesgando orgullosos y menos mal que no tienen un equipazo, sino "sólo" un buen equipo, con bajas, que ha peleado mucho. Su portero tuvo un fallo raro en el segundo de Karim, suerte para nosotros.
El 2-2 nos hizo pasar sin prórroga. Dicen que la final no es en Chamartín y es eso una ventaja hoy.

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