jueves, 31 de mayo de 2018

La ambición de Sanchez. Las ideas claras no abundan.

Y eso es lo grave, mire usted.
Me refiero a la moción de censura que comienza a debatirse hoy, las ideas van a brillar por su ausencia. Si se quiere otra versión más light, diré que solo hay una idea:
"Rajoy, fuera".
Lo que hará Rajoy está claro resistirá. Hay dos cosas que no le faltan, experiencia y calidad como parlamentario. Sobre la experiencia no voy a extenderme, basta con tirar de CV, lo interesante en estos tiempos de escasez es su habilidad, gusto, actitud parlamentaria. Abunda la escasez en cualidades nobles entre nuestros políticos de cualquier índole, los de la carrera de san Jerónimo y los de fuera, no dan la impresión de estar preparados, de tener ideas, se mueven entre los tópicos, y los programas de debates en televisión, entre la barra de bar y el consultorio sexologico. En medio de eso aparecerá el señor Rajoy, seguro, con su calidad parlamentaria y disfrutará de su momento, se vendrá arriba, y ganara la batalla.
Otra historia será la votación, los del PNV como aparente solución o gota que rebosa el vaso. Lo llamativo es que el señor Sánchez sería el presidente, sin pasar por las urnas y con un partido donde ni sus miembros lo ven medio preparado.
A esto hemos llegado. Lo malo es que no somos los USA que pueden permitirse cuatro años completos con alguien como Trump, o los Clinton, da igual, luego corrigen parámetros y la bola gira. Incluso podrían permitirse a un Sanchez en su versión latina. Desde luego la imagen estaría más depurada, aunque al dejarle hablar, solo ante el toro, los de Saturday Night Live se pondrían las botas. El poema del mío Cid, mío y de todos, ya lo sugería.

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