domingo, 19 de mayo de 2019

El fin de la liga casi eterna.

Último partido en Chamartín, temporada 2018/19 para olvidar o para aprender, aunque en el fútbol siempre hay matices y nunca se sabe todo. Hora al mediodía, rara hora, fresquito de mayo. Despedidas que no se han anunciado y se presumen algunas. Rival el Betis, el equipo sevillano simpático con el entrenador de la posesión. 
Yo pensando que se acabe este petardo de época porque no reconozco a mi equipo o les veo impotentes.
En la alineación inicial salen K. Navas, Llorente, que suenan a los de adiós por razones distintas. Vinicius, Brahim, Valverde, cantan a futuro inmediato. Y... ¿Marcelo, capitán sin criterio, o  Bale en el banquillo? Es mi opinión que hay jugadores a punto de confirmarse, más no todos. Ya veremos. 
Salen los dos con presión alta y pérdidas, sin gol. No es un partido duro, ahora bien a Vinicius no le dejan o él se precipita A mi el Betis, me da igual, pero hay jugadas iniciales indicativas de que no tenemos gol, no tiramos con peligro, no mordemos, no hay sistema defensivo y estos dilemas son antiguos.
El remate al palo en el minuto 35 de Benzema, con tiempo de pensar, es una demostración de lo que nos cuesta hacer un gol. Como este año haciendo bueno a todo el mundo que juega contra nosotros, como si nos empeñasemos en homenajear a la gente, hacer un casting contra el Madrid es un chollo hoy en día. Nos han fusilado en los goles. Las entradas de Asensio, Isco o L. Vázquez no han tenido peso.
Ahora que estoy a tiempo debo decirlo, no estoy seguro de las posibilidades de Zidane, sabe de esto, tiene ojo y carisma, influencia en los jugadores, el Madrid de la 2016/17 fue muy bueno y constante, pero ¿es capaz de crear un equipo campeón/competitivo?

No hay comentarios:

Publicar un comentario