miércoles, 3 de junio de 2015

El examen de la temporada 2014-2015 en el Real Madrid.

Paso a paso, porque este tema es complejo y los juicios, normalmente, resultadistas; me centraré en lo que creo fundamental,
El Real Madrid no ha sido competitivo "realmente" en fases decisivas de la temporada y eso es imperdonable.
No se ha ganado nada, pero además no se ha competido bien y el caso es que las eliminatorias perdidas o  los partidos donde se han dejado puntos que luego se echaron de menos no ha sido porque el rival haya jugado mejor sino simplemente porque se veía que algo faltaba y ese algo agrupaba factores muy diferentes al rival de turno o al árbitro del que tanto se habla casi siempre: decisiones tácticas, rendimiento de fichajes, falta de forma en varios, preparación física, distracciones en algunos partidos, entrega en el campo, colocación, solidaridad, apoyos,y...fortuna.
A muchos equipos se les ha ganado con superioridad en Liga y Europa; se han hecho mucho goles y recibido demasiados, pero los indicadores en la eliminatoria de Copa contra el Atlético de Madrid fueron en esa dirección negativa; el partido de Liga en Bilbao fue patético de nuestra parte en cuanto a competitividad así como el de Liga en el V. Calderón o el del Schalke en Chamartín. Además contra el FC Barcelona en Cataluña o el Valencia en casa se fue competitivo y se pudo ganar perfectamente.
¿Quiere esto decir que merecíamos ser campeones de algo? No en mi opinión, porque les he visto sus caras en el campo en los momentos decisivos y no se lo merecen.
¿Es responsable el signore Ancelotti ? Creo que si, aunque a mi como persona y profesional me caiga bien y este capacitado. 
No es el caso, ni la historia de los tres años de su antecesor, el señor Mourinho ; a este, como ya he explicado en otras ocasiones, le hizo fracasar su carácter, los enfrentamientos con jugadores en declive alguno (Casillas/S. Ramos/CR7/Pepe), o importantes, y la posición frontal de la mayoría de los medios de comunicación a los que no respetaba; demasiado directo, honesto, soberbio y sin tapujos, en un país donde eso no tes populista, que ya lo decía Cervantes.
Claro que habría que hablar de jugadores, uno por uno; sobre todo de algunos, que a pesar de los años en el club y su zarandeado madridismo, me parece que no tienen la inteligencia necesaria para saber lo que hay que hacer en los momentos difíciles.

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