domingo, 25 de febrero de 2018

El Deportivo Alavés. Coliseo romano XIII.

Me fui al fútbol, después de alguna ausencia, Chamartín presentaba un buen aspecto con un sol de invierno. A mi amigo el extraterrestre le conté que llegaba un visitante en buena forma, según los cronistas expertos, con ambición y nosotros teníamos ausencias debido a las lesiones y otras preocupaciones, además de muchos puntos de desventaja con el primer lugar de La Liga. Le tuve que explicar el rollo ese de la BBC, aunque no oye la radio mucho, ni habla inglés.Todo propicio para tropezar de nuevo.
Nada más lejos de la realidad.
En la primera parte el extraterrestre me comentó que los locales eran mucho mejores, recuperaban bien la pelota, pero faltos de precisión en los metros finales, los visitantes no creaban peligro ninguno. Llegó el 1-0 al final de los 45 y el siguiente rápido en la continuación, tan súbito que hizo desaparecer al rival, voluntarioso y tenaz.
El extraterrestre opinaba que el 9, Benzema, estaba fino, haciendo muchas cosas, muy activo; el 23, Kovacic, movía bien, corría y, a veces, se despistaba en defensa. Las oportunidades caían y el portero visitante ya no perdía el tiempo como en la primera parte, porque iban perdiendo, nada nuevo en este estadio.
Theo era otro que alternaba cosas buenas con errores. Me alabó mucho a K. Navas enmendando errores de sus defensas¿Cómo explicarle al extraterrestre tantas diferencias y matices? ¿Tantos factores de este juego? 
Al final 4-0 que se me antoja breve.

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