Los USA son algo más que un país, son una nación de grandes dimensiones que llega al Ártico o a ciertas islas del Pacífico lejanas; puedes vivir sin salir de sus fronteras sin hablar otro idioma, con todo tipo de clima; comiendo italiano, mexicano, chino, sushi, hindú, oriental o lo que sea adaptado a los gustos locales, nada sabe igual como en casa. El americano tópico y típico viaja a Europa en busca de sus raíces, para hacer lo mismo que sus estrellas de cine en las películas sin ser tan delgados ni tan guapos. Un país de emigrantes que empezaron allá por el XVII. Se producen intercambios sin asimilar. Hay ciertas cosas que no cambian en los humanos, aunque como ocurre en el siglo XXI ya viene del XX, los adelantos de todo tipo, el gran paso tecnológico, el mundo cada vez más pequeño con las mismas medidas, el supuesto mayor conocimiento, cultura de los habitantes del planeta, todo nos lleva a creer que al saber más de los otros, lo que no es nuestro, deberíamos ser menos aquellos que nos miramos al ombligo. Incluso el turismo donde tanto dinero se gastan los ciudadanos pudientes, y no tanto, no nos acercamos. Ocurre con la Unión, o Deunión, Europea que nos debería haber agrupado, aunque sin perder nuestra idiosincrasia , lo cual a lo mejor es imposible.Todos pensamos, creemos, soñamos, que lo nuestro es lo mejor, y está bien tener un poquito de autoestima sin menospreciar lo de los otros, aunque muchas veces encierra ignorancia, miedo, cortedad.
lunes, 22 de agosto de 2022
El ombligo del mundo
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