¿Good vibrations? or ¿Path to hell?.

Ya habrá resultados, yo mi reflexión la he escrito sin conocerlos porque honestamente no me gusta lo que veo. Lo leí ayer por la mañana, escribo esto en ese momento, el señor Sánchez tenía buenas vibraciones antes de votar, no se si porqué había oído a los Beach Boys desayunando, le informa Tezanos o vaya usted a saber. No sé lo que pasará hoy día después. Los medios que leo antes del voto, opinan dependiendo de sus tendencias para influir en la  victoria de la derecha, o la unión de la izquierda, ultraderecha, progresismo, miedo a VOX, demasiado ronroneo vacío sin sustancia. El problema que a mi me preocupa es que Sánchez probablemente debe irse por petardo aunque seguirá dando la lata, como Zapatero, en sus pluriempleos con señora incluida con frases sin sentido o como Aznar de conferencias en su inglés o en Venezuela, Nicaragua, ¿Marruecos?. Ese no es el problema fundamental. El tema está aquí entre nosotros, despistados, engañados. Si llega el PP, como necesite a VOX significará una vuelta a los tópicos y las frases alrededor de Mingorrubio sin sentido. Si gana por mayoría absoluta el PP, cosa que no barrunto, hay que rezar porque no cometa sus genéticos errores. Si ganase, o fuese posible, un gobierno de izquierdas/separatistas, con el clero hemos topado, además de otros cuatro años de Sánchez, más concesiones a los que quieren cargarse el sistema. Los de Bildu y ERC aglutinando a sus gentes, o los que se apunten, oportunistas, que exigirán su diezmo. Todo suena autodestructivo. Y esos son los verdaderos problemas de esta España que debería ser un país maravilloso, sin estar enfrascado en esas aspiraciones independentistas e interesadas, egoístas. totalitarias, que se creen los cantos de sirena, porque el hombre en su conjunto parece dotado de una capacidad increíble de repetir sus errores. Claro que lo escribo en la playa sin tener ni idea.