Arrepentimiento.

El Mar Cantábrico es una mar dura, fuerte, recia. En Agosto de 2000 fuimos al País Vasco invitados por un amigo, pasamos días en Zumaya el bonito pueblo de "Ocho apellidos vascos". No se come en ningún sitio como allí en esa tierra. sobre todo recuerdo unos huevos fritos patatas y chorizo de un caserío montañero, perdido, que ni lo de Arzak en su cocina al emérito, inigualables. En el  casoplón donde vivíamos había otros dos hermanos del anfitrión uno era del PNV, el otro de Herri Batasuna, se evitaban, había también un obispo en la familia. Mis hijos colaboraban a mirar debajo del coche por las bombas, lo hacían muy concentrados, todos seguían el ejemplo. Un día de ese mes, en la playa llegaron voces, noticias, habían matado en el pueblo al jefe de los empresarios vascos, un coche bomba. El pueblo se lleno de ministros del PP, Rato a la cabeza, y mucha gente, muchas miradas se cruzaban. No podía distinguir los de un bando a los de otro, ambiente siniestro. Han hecho una película donde los terroristas  que llevaron a cabo dicho asesinato, y otros, son los protagonistas, junto a familiares de víctimas. Es un guión cinematográfico, hay muchas frases, actuaciones, opinable todo, los terroristas arrepentidos se entrevistan con la viuda de un político del PSE. Responden a las preguntas. Me he quedado con una, como a los 14 años, ese futuro asesino, en Alicante veía como un sueño, un ideal, cualquier lucha en busca de la libertad y el socialismo en el mundo, pone Nicaragua como ejemplo. Pienso tocaté los cojones, o manda huevos de aquel. En efecto esos de Moscú eran verdaderos especialistas en explotar la estupidez humana. A otros se le ocurrirán otras enseñanzas. El mono nunca tropieza dos veces.