sábado, 24 de enero de 2015

No sólo de petróleo vive el hombre.

Le doy vueltas a lo de Arabia Saudita; sin embargo no han pasado grandes cosas, un rey ha muerto, después de una larga vida, y hay una legión de sucesores de todas las edades. No hay monarquía que tenga tantos. Luego no hay mayor problema, todo seguirá igual.
Veo las imágenes de tanta gente, colapsando la pantalla del televisor, todos muy parecidos con el thobes y el kefié de dameros rojos y blancos, con las gafas de ver o el reloj de oro en la muñeca que te permite descubrir que no estas en el siglo VII,.
La tradición es muy importante en Arabia, en sus arenas se encuentran muy cerca las ciudades santas de Meca y Medina, lugares asociados a Adán, Abraham e Ismael, a pozos salvadores de agua en el desierto, a la Kaaba y al inicio de las mezquitas.
La cantidad de gente que se aprecia en estas ciudades alrededor de sus templos, peregrinos alineados, descalzos, dando las sietes vueltas alrededor de una piedra sagrada son un símbolo de fuerza humana con el petróleo debajo
¿Qué sería de Arabia Saudita si apareciese la energía alternativa?
Según las fuentes oficiales le han enterrado sin nombre en la lápida, como persona humilde (creo que se refieren a persona sin un riyal saudí) y esto habla bien del difunto, como ser humano, porque efectivamente no se ha podido llevar nada con él. 
Todo aquel que es alguien en el mundo estará en los funerales, el petróleo es mucho petróleo, y no se puede hacer un feo a los saudíes, que se lo toman muy mal. 
Además parece ser que era un hombre sencillo, de fe sincera educado por los mejores ulemas de su época. 
Y es que los musulmanes creen que sus creencias son verdaderas, que no hay política de por medio, que la Hégira y las batallas posteriores están justificadas por una razón de ser que viene de lo más alto y comunicada al profeta. 
Cada uno de los jefes de estado asistentes al funeral pensará algo diferente pero todos harán negocios igual.

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