sábado, 7 de marzo de 2015

En el nuevo San Mamés un Madrid petardo.


Felicito al Atletic, hoy estarán felices, han ganado, defendido bien y agotado sus fuerzas.
Nuevo campo y las ganas de ganar al Madrid de siempre, lo dice Iríbar y es así en todos los campos de las Españas, objetivo : ganar al Madrid.
Los locales crecidos, finalistas de Copa, pitando a rabiar después de una buena comida vasca, y el Madrid bajo, flojo de ánimo y débil, confuso, desorientado, perdido. 
Como esto del fútbol es cosa de dos hay que decir que el Atletic a lo suyo, según los comentaristas basculando, apoyando, presionado, exigiendo, haciendo un gran partido (?), para los de Canal plus un partido perfecto de los locales que tiraron una vez a gol en la primera parte y otra en la segunda producto de un fallo del Madrid. El bonito gol parecía que lo había metido Zarra reencarnado, un poco exagerados. 
Les doy la razón que era un partido peligroso, pero porque el Madrid es lento, aburrido, inseguro, no desborda, no remata, no ataca bien, y jugando como jugó el Atletic, contra un Madrid que lleva meses jugando mal, es suficiente para ganarles; muchos pueden ganar hoy al Madrid. 
Este Madrid es impreciso, no presiona con orden, no se asocia, ni apoya es lamentablemente penoso y ultimamente ni remata. 
Independiente del otro equipo, el Madrid arrastra un grave problema interior y anterior.
Ya ni veo a Marcelo o Isco (vaya dos, que sean lo mejores es preocupante y nunca me pareció posible) como los que puedan acertar o arreglar esto, de hecho ambos han tenido muchas pérdidas de balón al igual que Bale, y el equipo más de 21 en total por fallos claros ninguno está. Entran ganas de cambiar a los once, bueno dejar a Pepe quizás, y a los tres suplentes.
Suena duro lo dicho, y no es deportivo rendirse porque hay que intentar ganar, pero ¿cómo? 
Alguno de esos que son tan buenos debe sentarse, es un reto de inteligencia futbolística.

No hay comentarios:

Publicar un comentario