sábado, 21 de marzo de 2015

Ni un duro, no dan ni un duro.

Llega ese partido que alguien bautizo como clásico, que no lo es tanto en realidad, pero ahí queda; se hace historia de lo reciente, se inventa y los periódicos "informan", los extranjeros lo oyen y a ver quién lo cambia. 
En fin, un partido de fútbol FC Barcelona-Real Madrid en el Camp Nou .
No se como están las apuestas, pero visto lo que he visto al Madrid desde hace ya cuatro meses (aún ganando), lo patético y penoso de su no-fútbol últimamente y al parecer el estado de forma de los locales y en particular la brillantez y acierto de Messi ¿Quién es el guapo que apuesta por el Madrid?
No hay que ser un genio para narrar el pasado o los últimos resultados, basta la memoria. Los antecedentes no sirven nada más que para rellenar páginas inútiles, la historia es pasado, el fútbol son los últimos encuentros, la forma demostrada y sensaciones, que lleven a la actitud correcta.
El Madrid del signore Ancelotti no ha presionado casi nunca, normalmente se producen huecos en el centro de la defensa muy grandes, no juegan juntos, no se apoyan y casi todos los equipos les superan en el centro del campo, en particular los rivales de cierta categoría, trabajada y con buenos jugadores; para colmo el portero ofrece una gran inseguridad. El equipo será el previsto.
En esta condiciones lo normal ha sido perder y que los del FCB culminen su ascensión al primer peldaño de la Liga y se refuercen para las Champions, si derrotan al actual campeón y si lo hacen con contundencia más. Les quedará el obstáculo del Bayern Munich.
Precisamente recuerdo la ida de las semifinales de Champions del año pasado, jugamos bien, mucho mejor que los alemanes, pero sólo ganamos 1-0 y quedaba el partido de vuelta; había temores ante el rival y fueron barridos por aciertos del Madrid, goles tempraneros y seguidos y desaparición del rival. 
Esas cosas pasan, aunque no se exactamente qué pasó aquella noche.

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