miércoles, 24 de enero de 2018

Algo huele a podrido en Dinamarca.

Lo han adivinado. No es una frase de Hamlet, no fue el bardo Shakespeare quien lo escribió, me lo han confirmado en England, que de eso saben mucho. En efecto algo huele a podrido en Copenhague porque hasta allí ha volado Puigdemont.
No se que personaje hubiese sido en una obra de Shakespeare. Pienso que el poeta, dramaturgo, quizás genio en eso de la escritura en inglés, no le hubiese prestado atención. Como héroe es más bien mezquino y corbardica. Como villano es blandón, foto, pegajosos. Ahora que han publicado las nominaciones a los Oscars de la Academia de Hollywood, tampoco creo que le hubiesen nominado, por petardo.
Lo curioso es que ahí sigue, en Bruxelles habitando, y ahora de viaje en Dinamarca, buscando la calavera del joven principe para hacerse la pregunta :
“ Ser o no ser...president de la Generalitat...esa es la cuestión”
Quizás sirva para que José Mota lo caja para su personaje del cansino histórico, no le veo otra salida.
Yo le dejaría salir al escenario, con todos esos inteligentes que le votan y me situaría de apuntador.
Puigdemont, cogería un libro, una calaver, un cuchillo, según versiones, y se pararía para pronunciar su frase para la historia, contemplando a sus fieles adeptos ensimismados.
Yo, como apuntador, le soplaría:
“Me voy ya...o voy a seguir dando la lata ...”.
No hay dilema, no hay duda. Dudar es de sabios, señor Puigdemont.

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