sábado, 28 de julio de 2018

El periodo de gracia se acaba.

Lo humano es temporal, perecedero y, como la fruta, en general de temporada aunque tengamos invernaderos.
Vivo en una casa en California donde no hay televisión (ningún aparato), ni cable ni gaitas, en el país de la televisión, con todas sus consecuencias, soy un siervo sin aparato. Eso si hay wifi, la conexión con ese mundo, a veces, irreal. Gracias a este soporte, leo lo que pasa, o dicen que pasa, en ocasiones, pocas, no hay duda porque son hechos, en muchos otros momentos, es pura elucubración, manipulación o todo junto.
Siempre escuche aquello de " ojos que no ven corazón que no siente".
Y escucho a ese ex llamado Zapatero, dice que con estas políticas (?) del PSOE estarán muchos años en el gobierno. No me inmuto saboreando mi te, conozco el personaje, no sé el mundo en el cual vive, y mi curiosidad nunca se verá satisfecha, si sé, que en el mejor de los casos, suponiendo su simpleza existencial algo positivo, donde nos va a llevar. Al mismo tiempo otros, no especialmente sus rivales, sugieren que se acabó, en pleno verano, la sensación soñada de Sánchez como inquilino de La Moncloa y que hay que empezar a gobernar, ingrata tarea, donde muy pocos estudian para ello, y donde absurdas quimeras minan la realidad del que tiene que cerrar cada día. Un tercer personaje que se niega a desaparecer dice desde Bélgica, la supuesta capital de la Desunión, que al gobierno se le acaba el tiempo de cortesía ¿ Qué pensará Borrell de cómo va a acabar esto? Es este el miembro del gobierno que me da credibilidad más allá de la palabrería, no debe ser fácil estar ahí, si se piensa como él.

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