miércoles, 27 de febrero de 2019

Semifinales copa, vuelta, con el Supremo oyendo declaraciones de testigos.

La vida continúa, no jugamos mal. Como dijo Bernabeu, en catalán, después de aquel noviembre 1960, Mr Ellis y Mr Leaf, en Copa de Europa : "les deseamos mucha suerte a nuestros amigos catalanes".
Por coincidencia el ex presidente Rajoy declaraba con meridiana calidad en el Supremo, en su estilo. No había dudas lo que pretendían los del intento de golpe de estado y don Mariano deja muy claro que son cuestiones del pueblo español no manipulaciones políticas, el orden constitucional, el estado de derecho, la soberanía nacional lo que quieren los españoles, no una parte. Se trata de justicia, de ley desobedecida de controlar la barbarie ante los caprichos de unos. Nada tiene que ver con el fútbol,
Supongo que don Mariano, aliviado, vería el partido de semifinales. 
Yo también voy a Chamartín a ver un Madrid-FC Barcelona, eso que llaman clásico, que nunca lo es para mi.
Una noche preciosa en Chamartín, temperatura excelente, luz y color. El campo lleno, la gente con ganas, animando. Los equipos con sus mejores hombres.
El nuestro bien dispuesto y colocado en el campo. Tenía un polaco a mi lado, aficionado del Madrid y el hombre se ha ido muy desilusionado, aunque explotaba con cada oportunidad, ocasión desperdiciada. 
Hemos movido bien el balón hasta el gol en propia meta que significaba el 0-2. No hemos cometido errores defensivos, excepto algún despeje alocado o exceso de salir con la pelota jugada. Nos hemos comido su centro del campo y el excelente Ter Stegen se ha ido vacío.
¿Cómo se explica el resultado? Sencillo. Hemos jugado mejor, no hemos marcado. Ellos han marcado tres de tres, así es el fútbol. El resultado 0-3 ha sido corto, porque ellos han jugado con su mejor hombre paseándose, como en una pachanga. A mi el equipo, justo vencedor, no me gusta, pero claro quizá no soy neutral.

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