Segundas partes.

 Dicen que segundas partes nunca fueron buenas. Yo he visto segundas mitades de partidos que nos han cambiado la vida para bien, claro que no tenían nada que ver con la primera parte. El problema es repetir comportamientos o pautas, hacer lo mismo. Entonces lo normal es que suceda lo mismo.

De segundas partes en USA.Ya acaba la convención demócrata en USA. La maquinaria en marcha, ha hablado Clinton, Bill, o Obama, Barak. Se trata de relevar a otro demócrata se trata de que no salga el Pato Trump. No dicen que la cosa vaya bien con Sleepy Joe no hablan de cambio, muy normal en los procesos electorales. Camelo Harris es un presidente de alegría es lo mejor de América. El Pato no ha pasado al ataque todavía ¿por qué?

No hay segundas partes. Oía a una señora, sin citar su edad, que echaba de menos sus mejores años. Obviamente contaba , como casi todo cristiano, sus batallas como ella las recordaba y ha acabado con una frase genial que hacía siglos que no escuchaba: Así que madre ya ...al cielo. 

Lo de la Mancha, de Cervantes, con mayúscula, te puede trasladar a otros lares cercanos que dicen eso de : ¡Ay señor!  llévame pronto que mi cuerpo pide tierra. Es  muy gráfico y viene a ser lo mismo. No hay segundas partes.

El primero es una expresión que indica otro talante, otra predisposición, sobre todo otra confianza.  Es mucho más positivo, como si estuvieramos hechos para Dios ¿hagamos lo que hagamos ?. El pueblo o los que decían esa frase quizá veían la vida como un pasar, un valle de lágrimas, llegaba un momento que la consecuencia era el premio. Además es una frase femenina que se dirige a la Virgen que sabe de estas cosas.