jueves, 16 de enero de 2020

A vueltas con la justicia.

En medio del Atlántico pensando en la justicia, una especie de puta por rastrojo utilizada en un sentido o en otro. Siempre he creido que en la raíz del mal, cualquier mal hay un poso de injusticia, si fuesemos justos, el mundo andaría mucho mejor. Hoy en esta sociedad, manipulada sin pudor, se utiliza la palabra justicia como las palabras democracia y humildad, que da la sensación que por pronunciarlas ya se adquieren. Ambas hay que currárselas mucho, excepto alguno , privilegiados, que son naturales en ser justos, humildes y demócratas. Dos de estas palabras la utilizan los "sabios" frecuentes futbolistas y entrenadores, los políticos utilizan las tres en el populismo de la ignorancia que nos invade. 
Justicia. Es una hermosa palabra, un ideal, algo necesario para la convivencia, hay que ser justos. La injusticia es como un virus que todo lo aniquila. Un "natural" en hacer y decir era aquel nazareno histórico que pronunció un sermón. Las bienaventuranzas son uno de los discursos más bellos de la Humanidad. Hay que pensar en el momento, en el contexto local del siglo I AD, en el pueblo al que iba dirigido, en el entorno, un lugar todavía maravilloso. Hay dos que hablan de justicia, los perseguidos a causa de la justicia, los que tienen hambre y sed de justicia. Entiendo que el Maestro que hablaba se refería al Reino de Los Cielos que es complicado de encontrar aquí en la Tierra, llena de injusticias. Su mensaje esta hecho para llenar esa insatisfacción humana que nos atormenta y se pueda encontrar la paz incluso en la injusticia. La justicia humana digna es aún imperfecta. En las Españas a las que llego se anda a vueltas con la justicia como si fuese patrimonio de unos u otros, manipulado su uso, justificadas las decisiones políticas en nombre de la justicia.

1 comentario:

  1. Totalmente de acuerdo. Días veleidosos donde con tanta ligereza se habla de JUSTICIA.

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