jueves, 2 de enero de 2020

Bienvenido 2020.

Otro año, mismas limitaciones, vender, vender, no pensemos, no busquemos nada, debemos creernos lo que nos dicen, repitamos lo que no son ni argumentos. 
Intentemos trasladarnos a otros tiempos, el año 1001, primero de enero, ¿dónde? Por ejemplo en una montañas como estoy ahora viendo enfrente mía en esa Edad Media de mis sueños no vivía nadie, en Europa vivían monjes con perros San Bernardo. Se reunirían para una sopa caliente, un vino, queso, leer los manuscritos que sólo algunos de ellos conocían, no veían las campanadas en televisión, no podían si no pensar en vestidos mágicos, números favoritos.
¿Un número bonito? ¿2020? No lo sé, dos ceros, dos doses, otro número más, depende. Estaba ojeando la prensa digital cuando en Madrid ya acababa el día. Es curioso porque las noticias son no noticias de los supuestos famosos, lo de las campanadas, quienes las cantan y una editorial que menciona que la soberanía no se negocia. No se que da más pavor de ser ciertas estas cosas, si quién es famoso/sa o eso de la soberanía.
Pronto volveré  hablar de fútbol que lo tengo abandonado..

No hay comentarios:

Publicar un comentario