Muchas veces me he acordado del frontón Fiesta Alegre y ese deporte al que yo no llegaba no sólo por falta de altura, el muro del frontón que asustaba a los soviéticos invencibles, el contraataque, la velocidad, el vértigo, antes había que coger los rebotes y don Pedro Ferrándiz, Basketball Hall of Fame, que de esto sabe y sabía, conducía el espectáculo. Ya se que también esta Lolo Sainz que para mi nunca fue los mismo y ahora, con tiempo por delante, veo a Pablo Laso (596 victorias), con los que trabajan en la sección de baloncesto y me parece que tienen mucho mérito. representan el espíritu del Madrid en casi toda su autenticidad; no se rinden, todo hasta el final, hay pocas quejas, vuelven a sacar jugadores y los grandes, los verdaderamente grandes, se sienten identificados con el espíritu, entendiendo que hay cosas que no se pueden hacer y además son imposibles. Sólo hay un problema, cuando ves a alguno de esos chavales pasar del junior al primer equipo, soltarse, demostrar lo que llevan dentro, empiezas a ponerte triste porque en USA hay otro nivel, están los más grandes y como mínimo quieren probar que se siente ante el sudor de Lebron James & Co. cerca. Perdón, necesitaba este auto bombo. Bien hecho Laso y Cia, enhorabuena por tantas alegrías, buen juego, lucha, sobreponerse, sin muro sin frontón, en un pabellón vacío, ya no son los soviéticos el objetivo sino nosotros mismos, mantenerse es muy complicado.
jueves, 10 de junio de 2021
Competitivos 596.
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